La convocatoria a una asamblea de copropietarios no es una mera formalidad, sino un requisito esencial según la Ley 675 de 2001. Esta ley hace hincapié en la importancia de convocar reuniones para debatir asuntos relacionados con la propiedad compartida.
La convocatoria garantiza, entonces, que todos los propietarios conozcan los pormenores de dicha reunión tales como: la fecha, el lugar, la hora y, en general, las condiciones en las que se desarrollará y asegurar así que tengan voz en el proceso de toma de decisiones y la oportunidad de expresar sus preocupaciones y sugerencias.
A través de estas reuniones, los propietarios pueden abordar colectivamente cualquier problema, resolver conflictos y tomar las decisiones necesarias en relación con el mantenimiento, la gestión y la mejora de la propiedad. La ley 675 reconoce la importancia de implicar a todos los propietarios en estos debates, promover la transparencia y fomentar un sentimiento de unidad y cooperación entre ellos.
Justamente, la reunión a cumplirse el próximo 15 de enero, tiene un especial significado, ya que durante el transcurso de la misma se informará a los asistentes sobre la marcha de las gestiones relacionadas con los estudios de patología estructural y, cómo consecuencia, cómo avanza la demanda a la constructora Marval
Por lo tanto, es crucial adherirse a las disposiciones de la mencionada ley y asegurarse de que las reuniones se convocan regularmente según lo prescrito por ella.
En cumplimiento de la norma ya mencionada, la administración acaba de convocar a todos los propietarios para que participen en la asamblea que se llevará a cabo el próximo 15 de febrero, a partir de las 8 AM .
